Un fin de semana en el Palauet de Monells

Sala de estarSi te preguntan cómo te imaginas un fin de semana perfecto, ¿qué respondes? ¿Y si te digo que el mejor fin de semana se encuentra a tan sólo una hora y media de Barcelona? Si señores, no hace falta que nos dejemos la piel ni el bolsillo, porque lo tenemos a nuestro alcance. Os quiero presentar El Palauet de Monells, un precioso hotel situado en el Baix Empordà.

El sábado pasado me esperaba una gran sorpresa. El día 20 de este mes fue mi cumpleaños y mi novio me planeó esta escapada. Mantuvo el lugar en secreto hasta el final y lo hizo – si puede ser – todavía más encantador (Novios del mundo, tomad nota de esto porque podéis quedar como un rey con vuestras princesas).

Las 11 del mediodía y llegamos al encantadoooor pueblo medieval de Monells. La anécdota del día fue la de encontrarnos de pleno con la grabación de la segunda parte de la película “8 Apellidos Vascos”. No puedo dar detalles porque sino me cortan la lengua pero tiene muy buena pinta. La acción transcurre en varios pueblos de la costa catalana, con eso os lo digo todo. Y además, uno de los escenarios es El Palauet. Vamos, exitazo.

SajolidaEntre cámaras, actores y walkie talkies nos dejaron entrar al centro del pueblo, donde se encuentra El Palauet. Al llegar al hotel, nos recibió la capitana del barco, Pilar. Ella es, sencillamente, la esencia del Palauet. Con una sonrisa de oreja a oreja nos llevó a nuestra habitación, Espígol. ¡Preciosa! El resto de habitaciones tienen nombre tan bonitos como Salvia, Sajolida, Romaní, Farigola y Menta. Un total de 6 habitaciones forman este hotel, que antes fue una casa señorial y ahora acoge a los huéspedes más afortunados.

Después de dejar las maletas, Pilar y su madre, también Pilar, y también un amor, nos enseñaron la casa entera. Admito que el hotel es precioso y tiene un encanto que lo hace especial, pero si hay algo que pone la guinda a ese pastel es la zona de spa con piscina y jacuzzi. Acceso libre con el precio de la habitación. ¡Quería ir ya! Pero el día era largo y aprovechamos para ir a comer una paella a Tamariu, a tan sólo 20 minutos y visitar por la tarde el castillo que Dalí regaló a Gala, en Púbol.

DesayunoEntonces si, las 7 de la tarde y unas ganas locas de probar la piscina y el spa. Disfrazados con albornoz y zapatillas, bajamos a la planta baja y nos relajamos durante una hora entre burbujas. Lu-ja-zo. Después del spa, nos arreglamos un poco para ir a cenar. Otro lujo, porque justo delante de El Palauet encontramos el restaurante El Roura Blanch, de comida casera típica catalana, con un trato muy amable y comida exquisita. ¿He dicho ya que en Monells son todos encantadores?

Y el domingo no pudo empezar de mejor manera. Me esperaba otra sorpresa por mi cumpleaños: un masaje relajante de 1 hora en el spa del hotel. ¡Oh, sí! Quien me conoce bien saben que me encantan los masajes. ¿Podía mejorar el fin de semana? Pues si, porque antes de entrar nos esperaba un ESPECTACULAR desayuno en la terraza del hotel preparado con todo el cariño por Pilar y su madre. Con la foto creo que sobran las palabras…

Y entonces llegó el masaje. La simpatiquísima Conxita me recibía con sus manos de ángel que me hicieron disfrutar de la horaSpa y Jacuzzi más placentera del domingo. ¡Qué manos! Si Monells no fuera tan bonito, seguro que la convencía para que se viniera a Barcelona conmigo para que me hiciera una masaje cada semana, ¡os lo juro! Pero las horas en el Palauet terminaban, no sin antes disfrutar de su terraza, tomando el sol en sus sofás y volviendo poco a poco a la realidad. Nos despedimos de Pilar y de su madre y les prometimos que volveríamos. Pero una promesa de las que se cumplen, ¿eh? ¡Cómo no vamos a volver!

Me haría mucha ilusión que conocierais El Palauet, de verdad. Y no hace falta que tengáis un motivo que celebrar. ¡El mejor fin de semana os está esperando!

El Palauet de Monells, Plaça Jaume I, 1, Monells (Girona), 972 630 012

Para info y reservas: info@elpalauetdemonells.com


Squeasy, plegable y personalizable

logotipo Marina PlanasLo nuestro fue un flechazo. La vi hace unos meses en algunas cuentas de Instagram y me llamó la atención su sencillez y personalidad. Y su versatilidad. Y su buena imagen. No se hable más, quiero una Squeasy, la botella plegable y personalizable.

Desde septiembre del año pasado, dos hermanos de Viladecans, Miquel y Mariona, decidieron traernos las botellas Squeasy a nuestras manos. De origen suizo, son botellas de polipropileno y sin BPA. Vamos, plástico del bueno, del que se recicla y del que no contamina.

Pero esto de que son plegables… ¿cómo va? Pues que puedes pasar de una botella monísima de 0,3 litros para llevar en el bolso sin que te ocupe espacio, a una botella de 0,7 litros para los días que necesitas dosis extra de hidratación o te hayas pasado con la sal en las comida, por ejemplo. Y luego comprímela de nuevo para que no te ocupe espacio. Y así para cada situación que necesites.

Yo la personalicé con mi firma, pero tienes muchas más opciones en su web: 24 colores diferentes y 34 tapones, totalmente combinables. Para añadir tu nombre, puedes elegir entre 4 tipografías distintas, en 6 colores para escoger. Aceptan también pequeños logotipos o ilustraciones en vector, pero para esto, mejor que les escribas un mail y les expliques exactamente qué necesitas.

botellas de coloresOtra cosa que me encanta es que la puedes meter en el lavaplatos y no tienes que preocuparte de lavarla a mano con lo incómodo que eso es. Y por el tema del mal olor no te preocupes, porque tiene un olor suave a vainilla súper-agradable que evita esa sensación cuando rellenas botellas de plástico. Y es que esta está hecha para esto, para que la llenes y llenes las veces que quieras. De agua, de zumo, de horchata – ahora que viene el tiempo de beber horchata -… Eso si, no le metas alcohol que ya se qué estás pensando. Gas y alcohol, mejor que no.

Todavía no llevo ni una semana con ella y ya le han salido mil novios. Y la verdad es que me estoy planteando regalar unas cuantas. Muy, muy original y yo quedo como una reina. Va, dime, ¿con cuál estás pensando ya?