A estas alturas, hablar de Flax & Kale es casi un clásico. Lo que hace años veíamos como algo raro e inusual, se ha convertido en la tendencia más seguida, y hipster del momento: raw food, platos veganos, sin gluten. O el concepto que cada vez se oye más, el flexitariano, una dieta vegetariana en aproximadamente un 80% en la que se puede comer animales y sus derivados de forma ocasional. Comer mejor, para que nos entendamos.
La experiencia de Flax & Kale es tan satisfactoria que saldrás con la sensación de haber recorrido 10 maratones. Y es que has comido sano, y muy bien.
El restaurante pertenece a los mismos dueños del Teresa Carles, un vegetariano de referencia en Barcelona. El hijo de Teresa Carles, Jordi Barri, mente inquieta e interesante, construye este concepto diferente al alcance de todos.
Sólo con su espacio ya te enamoras: dos comedores en la planta principal, con luz natural de día y un ambiente tenue perfecto de noche. Tú eliges si quieres compartir la velada con amigos o quizás con alguien más especial, aquí vale todo.
He visitado Flax & Kale en 3 ocasiones, tanto para cenar como para comer. Pero también sirven sanísimos desayunos, meriendas que no dejan remordimientos de conciencia y brunch los fines de semana. Sueño con su brunch. Pronto.
De todos los platos que he probado, siempre repito con uno de sus entrantes estrella: Sandía a la Parrilla con Queso de Cabra. La combinación parece rara, pero esmespectacular. Sus Supertagliatelle con Espirulina y dados de Salmón es otra opción de las que triunfa entre sus fans. O su ya conocida Hamburguesa de Atún con Wasabi con un pan integral de color negro que llama muchísimo la atención. De los postres quiero destacar el pastel de Dos Texturas de Chocolate o The Vegan Vampire Dessert, con pera y crema de naranja. Hay que probarlos. Por favor. La carta de platos innovadores con ingredientes naturales es muy amplia. Hay que probar la experiencia para darte cuenta de lo bien que sienta realmente cuando comes sano.
He dejado lo mejor para el final. Sus zumos. Los zumos de Flax & Kale merecen un capítulo aparte. Bajo la marca Teresa’s Juicery, ofrecen 15 sabores distintos que siguen la técnica del “Cold-Pressed Juicing”, con la que se extrae la pulpa y eliminan cualquier tipo de tratamiento agresivo durante el proceso, sin pasteurizar. Hay que dejarse impresionar por su nevera situada en la entrada, con todas las variedades expuestas como si fueran una obra de arte. Y si tenéis la suerte de poder visitar su obrador, detrás de la nevera, la satisfacción es completa.
Flax and Kale, c/ Tallers nº 74B (Plaça Castella), Barcelona, 93 317 56 64